Declaración de Lisboa

La Declaración de Lisboa de 1980 fue un principio de acuerdo a través del cual España se comprometía a poner fin al cierre de la Verja de Gibraltar, así como este país y el Reino Unido se comprometían a solucionar sus divergencias sobre Gibraltar.

Tras las elecciones generales de 1979 y la llegada del gobierno de Adolfo Suárez, el cierre de la frontera establecido en junio de 1969 por Francisco Franco, permaneció.

Finalmente el 10 de abril de 1980 el Ministro de Exteriores de España, Marcelino Oreja, y su homólogo de Gran Bretaña, Peter Carington, firmaron la Declaración de Lisboa, comprometiéndose a resolver el problema de Gibraltar y acordando restablecer las comunicaciones directas en la región.

En concreto el punto 3 de la declaración afirmaba: Sin embargo, no se llevó a la práctica de forma inmediata.

En noviembre de 1984 se dio lugar a la Declaración de Bruselas, cuyo único punto programático fue la puesta en marcha de lo acordado en la Declaración de Lisboa.