David Benedicte

[2]​ Su prosa puede enclavarse dentro del realismo sucio pero con una escritura propia y fuerte, que se enlaza con su poesía consiguiendo que sea uno de los poetas más sólidos de la quinta del 70, como ha dicho el crítico Antonio Crespo Massieu: “metáfora casi herética por su desmesura, el poeta nos habla desde el humor.

Poemas irónicos, sarcásticos, crueles, en los que el autor juega con la disposición gráfica y arma pequeños artefactos de poesía visual...

Esta mirada lúcida, esta voz propia, estos poemas de rabia y compromiso, este mirar el mundo con la lente deformante del humor y la pasión de la poesía, nos ayudan a ver la realidad”.

Y en especial ganador del prestigioso 31.er Premio Internacional Ciudad de Badajoz, con su último libro Poemarx.

O su participación como entrevistador y articulista en el libro: Del boom a los recortes.