), es el título otorgado a un emperador de Japón que abdica en favor de un sucesor.
[1] Establecido en el código Taihō, a pesar de su retiro, un Daijō Tennō podía ejercer poder.
El primer caso de Daijō Tennō fue la emperatriz Jitō, en el siglo VII.
Un emperador retirado a veces podía retirarse a una comunidad monástica budista y convertirse en un emperador enclaustrado.
Previo a Akihito, el último emperador en obtener dicho título fue el emperador Kōkaku en 1817.