Posteriormente se realizaron diversas obras con ese objeto, incluida una presa en el interior.
Tras abrir el conducto inicial, se internaron en las galerías interiores, algunas jamás holladas, donde efectuaron el hallazgo.
[4] Desde el primer día, los exploradores encontraron evidencias de que la cueva presentaba importantes problemas para la conservación del patrimonio artístico recién descubierto.
En algún momento las inundaciones han alcanzado la base de la sala del panel principal.
Se ha comprobado, asimismo, que algunos grabados situados en cotas inferiores sufren un progresivo deterioro por esta causa.