La cuenca de Qaidam, también transcrita como Tsaidam (en mongol: Цайдам, marismas saladas o valle ancho; en chino tradicional, 柴達木盆地; en chino simplificado, 柴达木盆地; pinyin, Cháidámù Péndì) es una región desértica del norte de la meseta tibetana, una amplia cuenca o depresión hiperárida.
[1] La región pertenecía a la antigua provincia tradicional tibetana del Amdo.
Su nombre probablemente proviene de tsa'i dam, que significa en mongol y en tibetano, «marisma salada».
Los pueblos nómadas que viven en la cuenca están compuestos por tibetanos y mongoles.
En las regiones más desoladas, de clima particularmente árido, solo los nómadas mongoles están presentes, debido a que sus animales (camellos, caballos, ovejas de cola grasa) soportan bien las difíciles condiciones, en contraste con los yaks y ovejas de los nómadas tibetanos.
[7]·[8][9] Los tibetanos creen que China quiere resolver sus problemas de energía a expensas de los recursos de petróleo y gas del Tíbet, acelerando el traslado de colonos chinos en detrimento del frágil ecosistema y del patrimonio cultural del Tíbet.
Entre sus muchos recursos minerales, destacan especialmente petróleo, gas natural, carbón, cloruro de sodio, potasio, magnesio, plomo, zinc y oro,[11] así como grandes reservas de asbesto, de bórax y yeso.