No debe confundirse con el actual cuatro puertorriqueño de cinco órdenes y diez cuerdas metálicas.
En 2012 la banda Sin dirección se convirtió en el primer artista en colocar música folclórica venezolana en un videojuego mundial, al lograr incluir su canción “¡Ay!” una fusión de joropo con pop rock en el popular videojuego Rock Band 3 producido por Harmonix Music Systems y MTV Games para la videoconsola Xbox 360 de Microsoft, donde niños y personas de todo el mundo se divierten intentando tocar el cuatro venezolano.
Solucionó bajando ese si2 a si1 en la primera octava obteniendo de este modo, por un motivo mecánico-económico, la afinación característica del cuatro venezolano.
Coloquialmente se conoce la afinación del cuatro con el nombre "cambur pintón" dado el compás musical.
Con la prima aguda, se facilitaría el iniciar un repertorio de obras en las cuales el punteo y el acompañamiento funcionarían simultáneamente.
Reyna cambió la afinación tradicional del cuatro, ordenando la altura de sus cuerdas en un mismo sentido.
En primer lugar está la técnica tradicional, en la que el cuatro venezolano se toca rasgueado y charrasqueado, percutivamente.
Desde los años 40 del siglo XX, se dio un gran desarrollo de la técnica cuatrística, en primer lugar con el trabajo del Maestro venezolano Eduardo Azuaje, cuyo sobrenombre artístico fue Jacinto Pérez, apodado El Rey del Cuatro[5][6] y, en la década siguiente, surgieron nuevos intérpretes, entre los que destacaron Hernán Gamboa y Fredy Reyna, quienes experimentaron con una técnica que mezcla punteo, rasgueado, con chasquidos, charrasqueados, entre otros sonidos y con cualquier recurso técnico generalmente empleado con las manos, llamado "Rasgapunteo" en la cual el ejecutante realiza las melodías y ritmos al mismo tiempo a través de movimientos muy independientes de la muñeca y los cinco dedos de la mano derecha, mientras la mano izquierda hace un uso amplio de las variaciones e inversiones armónicas.
Así podemos observar que una melodía cantada o ejecutada y su acompañamiento constituyen dos densidades distintas de concreción dentro del mismo lenguaje, mientras que una danza acompañada musicalmente constituye dos lenguajes con diferentes grados de concreción cada uno.
Al no poseer pisada produce una entonación fija y cumple el papel de resonador.
Se caracteriza por ser un poco más grande que el cuatro, y recibe su nombre debido al número de órdenes o afinaciones.
El octavo se halla hoy prácticamente extinto y como su denominación indica, es un instrumento cordófono de ocho cuerdas dispuestas en cuatro pares.
Su configuración estructural presenta una notable similitud con la guitarra renacentista, compartiendo número de cuerdas, órdenes y forma general, así como su función principal como instrumento melódico.
Se le ve aparecer en España a comienzos del siglo XIV con cuatro órdenes.
Cumaná era la segunda ciudad en importancia y es probable que por vía marítimo-fluvial se expandiera desde allí por todo el oriente.
A Cheo Hurtado se le debe una iniciativa de referencia para la cultura venezolana en el siglo XXI: La Siembra del Cuatro, terreno fértil para una inmejorable cosecha de instrumentistas que, tras su participación en el evento han emprendido una carrera musical, bien sea como solista o como acompañante.