La imagen del Cristo está tallada en marfil y es de bulto redondo y representado vivo, con la cabeza ligeramente inclinada hacia la derecha de cara ovalada en la que resaltan los grandes ojos abiertos con las pupilas incrustadas con piedra de azabache y presenta una barba y bigote con el pelo ondulado;[2] en el cuerpo tiene señalados los pectorales y las piernas completamente verticales, con los pies traspasados por un clavo individual cada uno; ha perdido los dedos de la mano derecha.El perizonium o falda corta de pudor (o paño de pureza), le cubre hasta las rodillas y está anudado a la cintura con un gran lazo.En la parte trasera del cuerpo, como era común tiene un hueco para usarlo como relicario.La cruz donde está clavado es latina, con una decoración en todo su borde de personajes que representan los bienaventurados ascendiendo al cielo y otros personajes descendiendo a los infiernos.Hay imágenes entremezcladas de animales y vegetales.
Reverso del
Crucifijo de don Fernando y doña Sancha