Varias de sus películas, como La muerte del Sr. Lazarescu y Sieranevada, han recibido numerosos premios.
Después del primer año cambió al estudio de cine en la misma escuela, donde se graduó en 1996.
Cristi Puiu debutó como director en 2001 con la road movie de bajo presupuesto Marfa și banii, protagonizada por Alexandru Papadopol y Dragoş Bucur.
Su segundo largometraje, La muerte del Sr. Lazarescu (Moartea domnului Lăzărescu) (2005), es una comedia oscura sobre un hombre anciano gravemente enfermo, quien es llevado de hospital en hospital toda la noche mientras los médicos se niegan a darle asistencia.
En colaboración con Răzvan Radulescu, Puiu escribió el guion para Niki y Flo, encargado por Lucian Pintilie, uno de los directores rumanos más importantes.