Las protestas, propiciadas contra el gobierno del Presidente Marc Ravalomanana, comenzaron en enero de 2009[1] y se tornaron violentas, siendo organizadas por Rajoelina, quien era el alcalde de la ciudad capital de Antananarivo y principal opositor del presidente Ravalomanana.
[1][2] Al menos cien personas murieron en Madagascar durante las protestas.
Al menos 140 personas han muerto en los disturbios desde enero de 2009.
Alemania suspendió la ayuda al desarrollo del país y pidió un rápido regreso a la democracia.
Cuando Andry Rajoelina asumió el cargo, en los días siguientes estallaron nuevamente protestas masivas en la capital de Madagascar.