[1] Su asesinato fue el primero reconocido judicialmente como motivado por racismo y xenofobia en España.
[2] Los dominicanos, en su mayoría mujeres, se reunían en una plaza-parque de Aravaca, particularmente los jueves y los domingos por la tarde.
La tensión se convirtió en conflicto, participando grupos externos a favor y en contra.
Otros acusaban a la Policía Municipal por su acoso; “Han sido ellos los principales instigadores.
El viernes 28 a las 7:45; 8:40 y 10:45 se arrestó a tres menores: Javier Quílez Martínez, Felipe Carlos Martín Bravo y Víctor Flores Reviejo, de 16 años, acompañantes del autor material.
Todos confesaron los hechos que se les imputaban en el asesinato del viernes 13 de noviembre en Aravaca.
Alguno señaló la discoteca abandonada de Four Roses, donde dijo dormían negros dominicanos, según se reportó en la prensa.
A la altura del Estadio Vicente Calderón, un coche de la Policía Municipal, al observar cómo se pasaban dos semáforos en rojo, los detuvo, pero Merino enseñó su identificación como guardia civil y los dejaron pasar.
Entraron, golpearon una puerta de donde salía luz, Luis Merino avanzó y disparó.
De regreso el guardia civil alardeó: “Les he dado tres plomos, que se los repartan como puedan.
El último incidente ocurrió cuando querían apalear a un marroquí que les cogió en autoestop, impidiéndoselo la policía local al darse cuenta de los hechos.
[4] En estos días tuvieron lugar las manifestaciones más concurridas y activas contra el racismo, que se conocen en España.
El Pleno del Congreso aprobó por unanimidad el lunes 16, una declaración institucional: La Asamblea de Madrid aprobó por unanimidad (PSOE, PP, IU) la “condena del execrable acto criminal de Aravaca” y expresó “su dolor solidario con las inocentes víctimas, sus compatriotas y familiares”.
El cantautor granadino Carlos Cano también escribió “Canción para Lucrecia” dedicada a ella.