Estas señales son: laxitud (flaccidez), ritidosis (arrugas) y fotoenvejecimiento, el cual incluye eritema (enrojecimiento), despigmentación (decoloraciones marrones), elastosis solar (coloración amarilla), queratosis (crecimientos anormales) y cambios en la textura.
Un estudio indicó que el mejor resultado fue la reducción de arrugas en un 10 % tras 12 semanas, lo cual no se percibe a simple vista.
[2] Otro estudio concluyó que los hidratantes baratos eran igual de eficaces que las cremas antiarrugas más caras.
[6] Tradicionalmente, los anuncios de las cremas antiarrugas van dirigidos a las mujeres, pero cada vez hay más productos de este tipo también para los varones.
[7] Las cremas antiarrugas suelen incluir entre sus ingredientes hidratantes convencionales.