La corteza prefrontal dorsolateral (DL-PFC) se ubica por delante del área premotora (motora secundaria).
[3][4][5] La corteza prefrontal dorsolateral representa relaciones complejas, que se pueden aplicar para convertir estímulos en respuestas.
Las habilidades cognitivas que permiten al individuo controlar y regular sus comportamientos reciben el nombre de funciones ejecutivas.
Anatómicamente, las funciones ejecutivas dependen de un sistema neuronal, en el cual el córtex prefrontal desempeña un papel destacado.
[6] El DL-PFC ejerce modulación sobre las funciones ejecutivas, como la memoria de trabajo, la flexibilidad cognitiva, la planificación, la inhibición y el razonamiento abstracto.