Corte por arco-aire

El equipamiento es el mismo que el necesario para la soldadura por arco, salvo que el portaelectrodos incluye unos orificios para la salida del aire a presión, y se necesita por tanto un caudal adicional de aire comprimido.

Este aire tiene que ser completamente seco y muy caudaloso, por lo que se precisa de potentes compresores que lo filtren y proporcionen un volumen de entre 700 y 1000 litros por minuto, lo que mantiene una presión de trabajo de 6 kg/cm2.

Se necesita principalmente de corriente continua con polaridad inversa.

La primera evidencia de este corte, es que al ser necesario establecer un arco eléctrico, el material a cortar ha de ser necesariamente conductor, lo que reduce su aplicación a la gama de metales empleados en calderería (acero, fundición, magnesio, aluminio).

Su principal ventaja es que su naturaleza de arco y gracias a su barrido de aire le convierten en un sistema ideal para realizar limpiezas y levantar cordones de soldadura.