Corredor ecológico

Todos estos corredores conforman, en el marco de una malla compleja, la red ecológica a nivel local y mundial.

Los corredores biológicos están diseñados para proteger el conjunto de especies nativas y cumplir con las funciones básicas de conectividad al tiempo que se maximizan el uso sostenible del bosque y los beneficios derivados de los servicios ambientales.

El corredor solo ejercerá una función facilitadora para las especies asociadas a este hábitat específico.

Algunas de las herramientas clave para conseguir proyectar y planificar un corredor son Linkage Mapper[7]​ o Corridor Designer.

[8]​ La primera de ellas permite conectar múltiples hábitat mediante trazados lineales.

Todas las estructuras que actúan como corredor biológico no son tan fáciles de identificar como estos bosques ribereños en Indiana (Estados Unidos). Algunos corredores pasan desapercibidos a la vista, pero son funcionales y vitales para las especies que los utilizan y que tienen necesidades especiales como por ejemplo la humedad, la acidez o la pureza del agua. Nótese en la foto la presencia de carreteras que fragmentan el espacio ecológico.
En este paisaje los bosques ya no están conectados físicamente. Muchos invertebrados quedan de esta manera aislados en el bosque. Sin embargo, jabalíes y ciervos todavía pueden fácilmente pasar de un bosque a otro.