Consumo sostenible
En su definición inicial: El consumo y la producción sostenibles son indispensables en la lucha mundial contra los desafíos de sustentabilidad como el cambio climático, el hambre o la contaminación ambiental.La primera condición no es suficiente por sí misma y puede ser nombrada como debilidad del consumo sostenible.Las mejoras tecnológicas y la ecoeficiencia apoyan una necesaria reducción del consumo de recursos.En el ámbito político, la debilidad del consumo sostenible se ha discutido, mientras que el fuerte consumo sostenible falta en las discusiones de todos los debates.[4] Teniendo en cuenta estos dos enfoques de consumo sostenible, es evidente que los consumidores individuales juegan un papel clave.