Con ella, Getúlio Vargas implantó un régimen autoritario que duró hasta el fin de la Segunda Guerra Mundial.
Una de las causas para la instalación del Estado Nuevo fue la creciente amenaza comunista, verificada en varios episodios ocurridos entre 1934 y 1937.
El Congreso hubo permitido la amnistía a los antiguos perseguidos políticos, entre ellos Luís Carlos Prestes, tenentista, líder de la Columna Prestes, que estaba afiliado al Partido Comunista de Brasil (PCB).
Chafando la revuelta con facilidad, Vargas la usó como justificación para la ley de Seguridad Nacional (aprobada en el Congreso algunos meses antes), que suspendió la Constitución en vigor y permitió la prohibición de la ANL.
En ese sentido, el Estado Nuevo no tuvo elementos típicos del totalitarismo fascista europeo: ni partido único, ni movilización de las masas y ni proyectos expansionistas — el Estado Nuevo fue más un régimen paternalista autoritario mismo como, de hecho, convenía al carácter brasileño.
Desde el punto de vista político, sin embargo, representa casi siempre una concesión hecha por aquel poder a un contrapoder popular ascendente.
El día 10 de noviembre de 1937, tras cerrar el Congreso y firmar una nueva Constitución, Vargas hizo un pronunciamento, transmitido pelo radio, en que buscaba justificar la instauração del nuevo régimen.
En su "Proclamação al Pueblo Brasileño", defendía el golpe como la única alternativa posible delante del clima de desagregación y de afronta a la autoridad en que hube buceado la nación.
Se refería, entre otras cosas, al peligro del comunismo, acordando la radicalização política que hube alcanzado el país.
El argumento para fortalecer el Poder Ejecutivo era que la Constitución de 1934, con su liberalismo, lo había enflaquecido y hecho vulnerable a los intereses privados.
El golpe fue seguido de una fuerte represión, a cargo de la policía política, que alcanzó no solo los comunistas o los liberales, pero aún aquellos que advogavam una ideología semejante a la del nuevo régimen y suponían ser sus aliados: los integralistas.
Fue así que, junto con los demás partidos políticos, la Alianza Integralista Brasileña fue cerrada por decreto presidencial.
Fiel al principio de que era necesario aplacar las disputas políticas para promover el desarrollo del país, también en el plan administrativo el gobierno del Estado Nuevo buscou eficiencia y racionalidad.
Años más tarde, la preocupación con la formación de personal para actuar en la administración daría origen a la Fundación Getúlio Vargas (FGV).
La tendencia a la intervención en la actividad económica, expresa en la aparición de las primeras compañías estatales, hizo con que, a partir de 1937, quedara difícil separar el binomio Estado y economía.
Casi todos eran efímeros de la República Vieja, pues ya no restaba casi nada del PRP, del PRM o del PRL, y los demás PS, PD, UDB y otros eran formados solo en época de elección y acostumbraban disolverse tan luego estas eran realizadas.