El condominio es una forma de gobierno en la que dos o más Estados ejercen la soberanía compartida sobre un mismo territorio.
Los estados parte pueden ejercer control sobre el territorio de dos formas: a través de órganos intermedios, que constituyen el gobierno local o acordando el establecimiento de una administración dividida.
[1] Con frecuencia los condominios se establecieron sobre territorios fronterizos en disputa, ante la imposibilidad de los Estados de resolver el conflicto de soberanía.
[2] El condominio también se puede establecer sobre ríos, bahías y golfos, como lo reconoció la Corte Internacional de Justicia en el caso del golfo de Fonseca, el cual comparten los países de Honduras, El Salvador y Nicaragua.
[3] Algunos ejemplos de condominio son: Según la ley francesa, Andorra fue considerada una vez como un condominio franco-español, aunque se clasifica más comúnmente como un coprincipado, ya que es en sí mismo un estado soberano, no una posesión de una o más potencias extranjeras.