El condado de Zelanda fue un estado vasallo del Sacro Imperio Romano Germánico.
Ocupó el delta del río Escalda, correspondiéndose aproximadamente con la actual provincia neerlandesa de Zelanda, a excepción del Flandes zelandés, que era parte del condado de Flandes.
El territorio consistía en varias islas, a veces anegadas por el mar, entre las cuales la mayor era Walcheren.
[1] En 1433, previa renuncia de Jacqueline de Baviera, pasó a los dominios de Felipe III de Borgoña.
Durante la soberanía española de los Países Bajos, el título de conde de Zelanda pasó a suscribirse a la monarquía española.