[1] La ciudad aparece mencionada por vez primera en 1108, en aquella época conocida con el nombre de Aldenburg.
Los habitantes más antiguos documentados de la región que hoy se llama Oldemburgo son un pueblo teutónico, los caucos.
El control sobre la ciudad fue dejado a los hermanos del rey, quien estableció una tiranía de corta duración.
En 1454, entregó Oldemburgo a su hermano Gerardo (h. 1430-1499), quien constantemente guerreó con el obispo de Bremen y otros vecinos.
El nieto de Antón, Antonio Gunter (1583-1667), quien sucedió en 1603 amplió significativamente y enriqueció sus territorios.
Así se consideró a sí mismo como el príncipe más sabio que jamás gobernase Oldemburgo.
Antes de su ascenso se había adquirido Jever, pero en 1624 añadió Knipphausen y Varel a sus tierras; así, en 1647 Delmenhorst quedó unida definitivamente.
Los reyes daneses dejaron de estar interesados en la ciudad y ésta perdió su antigua importancia.