Tras esto, el piano hace una esplendorosa aparición, una poderosa muestra de virtuosismo en forte, pero variable (crescendos, decrescendos, subito fortes y pianos protagonizan la escena), para finalizar en un glissando al completo que da lugar a la aparición de la orquesta, que aumenta a un fortissimo para luego decaer de nuevo a un mezzopiano.Tras esta pequeña introducción la orquesta realiza un breve pero brutal fortissimo con percusión incluida para luego darle paso a un piano sombrío pero poderoso.Continúa peleando con la orquesta con los vientos (flautas sobre todo) hasta reaparecer los bajos y el contrafagot.Este lamentable suceso sumió al joven Wittgenstein en una gran agonía y depresión.Maurice Ravel estaba en proceso de componer su celebrado Concierto en Sol Mayor para Piano cuando recibió en su casa a Paul Wittgenstein, y conmovido por el caso decidió posponer la obra que tenía en proceso y desarrollar la comisión de escribir una obra especialmente para Wittgenstein, tarea que le consumió nueve intensos meses.En esa primera presentación no estuvo presente Ravel, sin embargo la obra siguió en cartelera en Europa y no fue sino hasta finales de ese mismo año que el compositor pudo escucharla con Wittgenstein en el piano.