[1] El principio se encuentra prefigurado en la obra del lógico Gottlob Frege,[2] y el primero en formularlo explícitamente, en sus dos versiones más conocidas, fue Rudolf Carnap.
En ambos casos, la composicionalidad es una propiedad de una semántica respecto a una sintaxis.
Una semántica, a su vez, puede entenderse como una función μ: E→M que vincula cada expresión gramatical con su significado.
Las formulaciones funcional y sustitucional del principio de composicionalidad pueden darse como sigue:[4] Quienes ponen en duda el principio de composicionalidad señalan que en ocasiones, el significado de una expresión compleja puede variar según las intenciones del hablante y el contexto.
[1] Por ejemplo, la oración "Abelardo ama a Eloísa" puede significar algo distinto si el hablante está siendo irónico.