Es lógico pensar que cada individuo posea aspectos positivos y otros negativos.
Posiblemente los aspectos negativos del ser son obviados por su psiquis para obcecarse sólo con los positivos.
La exhibición del complejo de superioridad, generalmente, se proyecta hacia los sentimientos de inferioridad con respecto a los demás.
En el resto de las personas, al estar con una persona con este tipo de complejos, se puede llegar a pensar que son arrogantes o que quieren hacerse destacar por aspectos banales.
Los complejos de superioridad e inferioridad son a menudo presentados ambos en las mismas personas, y se manifiestan de maneras diferentes.