Colio

Se encuentra a 571 m s. n. m. y dista cinco kilómetros y novecientos metros de Tama, la capital municipal.

Parece ser que es a partir del ruido que causan las caídas de estas rocas que se originó una leyenda local, referida a los «Diablillos de Colio».

De su patrimonio arquitectónico destaca una portalada del siglo XVIII y la iglesia parroquial que en origen data del siglo XIII.

Todavía se conserva en el pueblo la portada de entrada a la finca que sirvió como escuela de oficiales.

En la tradición local se conserva el llamar a los mozos "espolistas" que calzaban espuelas en recuerdo de aquella escuela.