[1] La piedra fundamental fue colocada por el jesuita español José Sato y es obra del arquitecto Pedro Luzetti.[3] La institución es precursora de la Universidad del Salvador, también jesuita, que en un principio usó sus instalaciones.[7] Se trataba del hermano César Fretes, quien trabajaba como tutor y acompañante espiritual de los alumnos.[9][10][11] En el año 2001 un alumno denunció ante las autoridades del colegio al hermano Fretes, pero el rector de entonces, el padre Rafael Velasco desestimó la denuncia.[9][13][14] En respuesta a la publicidad de los hechos, el Colegio del Salvador emitió un comunicado reconociendo lo sucedido y haciendo su descargo.