La construcción, que se interrumpió varias de veces y pasó por diversas fases, duró cerca de trescientos cincuenta años.
El papa Pablo VI en 1966 concedió el uso de la mitra abacial, anillo y báculo al abad del cabildo Colegial; el mismo Papa en 1973 declaró Basílica menor a la Colegiata.
El estilo en el interior es de clara influencia herreriana por su austeridad similar al Escorial.
La iglesia tiene cuatro puertas, todas de sillería y de gran monumentalidad: la del ábside, de adscripción serliana, realizada en 1600; las dos laterales, gemelas, ejemplos destacados del barroco valenciano, y la fachada principal, construida con elementos de tradición románica y bizantina, terminada en 1920.
La Seo, obra monumental en tamaño e inacabada, pues al campanario ya existente, le debería acompañar un segundo campanario gemelo, según los planos originales de construcción de la Colegiata.