Beneficio eclesiástico

Muchas veces el beneficiado no tenía necesidad de cubrir personalmente su beneficio, pues podía hacerlo mediante un vicario cuando el titular tenía superiores ocupaciones, o era menor de edad, o simplemente no podía o no quería desplazarse a un lugar lejano o desagradable por algún motivo, con lo que en muchos casos los clérigos llevaban una vida poco edificante en ambientes alejados de su teórica misión.También se daba el caso aún menos justificable de acumular varios beneficios.De ejercerse el cargo mediante un vicario, este recibiría las congruas, y el resto el titular.La Reforma protestante, aunque no afectó de la misma manera al clero regular y secular, exigía la presencia del titular de una parroquia entre sus fieles, y en algunas iglesias, era elegido por estos mismos.En otras confesiones más jerarquizadas, como el anglicanismo, la situación era similar a la católica, con la diferencia de que los sacerdotes podían contraer matrimonio.