El nombre científico hace referencia a los habitantes prerromanos que ocupaban esas tierras: los vetones.
[3] Antes se la consideraba una subespecie de Cobitis paludica, pero desde finales del siglo XX es tratada como una especie diferenciada surgida por el aislamiento geográfico.
[4] Como las otras especies del género es un pez relativamente comprimido lateralmente, con forma filiforme, de coloración parda con manchas más oscuras a lo largo del cuerpo, boca ínfera y espina suborbital bífida retráctil.
[5] Son ovíparos y no realizan ningún tipo de cuidado parental hacia sus crías.
[7] Prefiere, por tanto, aguas claras y oxigenadas que, además, están más a salvo de la intervención humana.