Fernando Utande, director general adjunto de la Caja fue el gran impulsor de este cambio y fundador del Club Deportivo Cajamadrid Al año siguiente se ficha a casi todos los jugadores del BM Jaén que se retiró por problemas económicos y que había quedado quinto en la división de honor.
Ya en la élite del balonmano español la caja subió la apuesta fichando como entrenador al mítico Domingo Bárcenas leyenda del balonmano, y construyó un moderno pabellón en Alcalá de Henares (el pabellón Caja Madrid), ya que esta ciudad acogió al club creándose una afición que animaba al equipo.
Después de varias temporadas de altibajos el equipo se afianza en la categoría acabando segundo en la temporada 1987/88, y tercero en la siguiente, aunque se jugó el título en la última jornada y ante el FC Barcelona en casa.
Estos resultados hicieron que el equipo se clasificara para jugar la Copa de Europa IHF llegando hasta las semifinales las dos ediciones.
Las siguiente cuatro temporadas Caja Madrid patrocinaría al Club Juventud Alcalá, equipo al que cedió la estructura deportiva, para que Alcalá de Henares siguiera teniendo un equipo en la liga Asobal.