Cleopatra Selene mantuvo el control sobre algunas ciudades costeras hasta que Tigranes II la sitió en Ptolemaida en 69 a. C., capturándola y ejecutándola posteriormente.La tensión entre el rey y su madre creció y terminó con la expulsión del primero de Egipto, quien no llevó consigo a Cleopatra Selene; esta probablemente se casó con el nuevo rey, su otro hermano Ptolomeo X.Cleopatra Selene controló varias ciudades costeras hasta que Tigranes II la asedió en 69 a. C. en Ptolemais; el rey armenio capturó a la reina y luego la ejecutó.[7] Esos matrimonios mixtos sirvieron a Egipto para desestabilizar a Siria, que estaba especialmente fragmentada entre los diferentes aspirantes al trono;[8] los hermanos se disputaban el poder y Egipto intervenía en las discordias apoyando alguno de los pretendientes contra los demás.[14] Por otro lado, los estudiosos modernos, como Arthur Houghton y Catharine Lorber, creían que Selene era en realidad un epíteto.[24] El matrimonio entre hermanos era conocido en el antiguo Egipto y, aunque no era una práctica general sino restringida a la pareja real, era aceptable para los egipcios;[25] así que los soberanos griegos ptolomeos lo practicaron imitando a sus antecesores autóctonos, quizás para consolidar la dinastía.[31] Cleopatra Selene, favorecida por su madre Cleopatra III, fue elegida nueva reina consorte en 115 a. C.[10] La relación entre Ptolomeo IX y su madre se deterioró en 107 a. C.;[32] Ptolomeo se vio obligado a exiliarse por imposición materna y dejó en Egipto a su esposa e hijos.[35] La reina madre temía una alianza contra ella entre Ptolomeo IX y su amigo Antíoco IX de Siria, que estaba librando una guerra civil con su hermano Antíoco VIII; esto la llevó a enviar tropas a Siria.[nota 4][34][36] El matrimonio de Cleopatra Selene y Antíoco VIII tuvo lugar en torno al 102 a. C.;[39][36] el historiador Leo Kadman sugirió que Cleopatra III le dio a su hija al rey sirio en Ptolemais antes de retirarse a Egipto, y que Cleopatra Selene tuvo en ella su residencia principal hasta el final de su vida.[42] La manera en que Antíoco IX tomó el control de Antioquía y su nueva esposa en el 95 a. C. no está clara; podría haber tomado la ciudad por la fuerza o quizá Cleopatra Selene le abriese las puertas.[47] Es poco probable que este matrimonio contentase a los hijos de Antíoco VIII.Un año después de su matrimonio con la reina, Antíoco IX marchó contra su sobrino, pero fue derrotado y asesinado.[51] La justificación del matrimonio quizá fue pragmática: Antíoco X ansiaba ser rey, pero tenía pocos recursos y necesitaba una reina.Por su parte, Cleopatra Selene tenía unos cuarenta años y no podía contraer nupcias simplemente con un rey extranjero.[69] El arqueólogo Alfred Bellinger sugirió que controlaba varias ciudades costeras sirias desde una base en Cilicia; ciertamente poseía Ptolemais y probablemente también Seleucia Pieria.[72] Esta tipografía apare en las monedas damascenas de Demetrio III y Antíoco XII, pero es rara en el mundo helenístico.[71] Existen, pues, dos posibilidades: En el norte, Filipo I gobernó hasta su muerte, después de lo cual Cleopatra Selene reclamó los derechos de sus hijos que había tenido con Antíoco X al trono vacante.[70] El Senado se negó a tratar su petición acerca del trono egipcio, pero, según Cicerón, sí se les reconocía su derecho de iure al sirio, que habían heredado de sus antepasados.[84] Tigranes II, cuya invasión probablemente tuvo lugar durante la ausencia de Antíoco XIII,[79] nunca controló todo el país y tomó Damasco solo en el 72 a. C.[70] Cleopatra Selene resistió a los armenios en Ptolemais, mientras que Antíoco XIII probablemente se refugió en Cilicia.[22] Según Estrabón, Tigranes II encarceló a la reina en Seleucia y luego la mató.[85] Esos relatos parecen contradecirse, pero en opinión del historiador del siglo XVII William Whiston, no lo hacen, ya que Josefo no menciona que Tigranes II apresase a la reina en Ptolemais.Los romanos intentaron simplemente reemplazar a los reyes sirios como autoridad imperial en la región cuando pusieron fin a la dinastía seléucida en el 64 a. C., pero el hecho de que Roma fuese una república puso en tela de juicio su legitimidad.[114] Un texto demótico indica que Berenice III era la madre de Ptolomeo XI, pero la palabra egipcia utilizada para denotar «hijo» también puede significar hijastro, que es el significado preferido por la mayoría de los estudiosos para la palabra del pasaje en cuestión.
Antioco VIII
Antíoco IX
Siria hacia 87 a. C.
Moneda de bronce de Cleopatra Selene y Antíoco XIII. El reverso indica que fue acuñada en Damasco.
Antíoco XIII, moneda que lleva el epíteto Filadelfo