Se destacó dándoles libertad a muchos peones esclavos en premio por sus servicios militares.
Tuvo decenas de encuentros armados con los indios, y aprendió a combinar la fuerza con las negociaciones.
Por su parte, los indios aprendieron a aplicar la misma política, alternando malones con tratados de paz.
Organizó cinco compañías de Blandengues, destinadas a guarecer la frontera sur con los indígenas.
Por detrás tenía corrales suficientes para guardar mucha hacienda, a cubierto de ataques indígenas.