[5] Son conocidas popularmente como remolineras;[6] y también churretes o meneacolas, entre otros.
[8] Las remolineras son furnáridos robustos, miden entre 16,5 y 24 cm de longitud.
La mayoría de las especies presenta una faja blanca o rufa en las alas, más visible en vuelo y que no aparece en las bandurritas (Upucerthia), que son de alguna forma similares (pero más uniformes) y cuyos picos tienden a ser más curvados.
[9] Según las clasificaciones del Congreso Ornitológico Internacional (IOC)[10] y Clements Checklist/eBird,[5] el género agrupa a las siguientes especies con el respectivo nombre popular de acuerdo con la Sociedad Española de Ornitología (SEO),[6] u otro cuando referenciado: (*) Estado de conservación Espécies fósiles: Los amplios estudios de las relaciones filogenéticas dentro del presente género realizadas por Chesser (2004a), concluyeron por una nueva relación linear de las especies y sugieren que la especie C. taczanowskii debería ser tratada como conespecífica con C. nigrofumosus, y también que la especie C. olrogi debería ser tratada como conespecífica con C. oustaleti, con base en la muy débil distancia genética entre ellas, consistente con el bajo grado de diferenciación morfológica y comportamental entre estos dos pares de especies hermanas, lo que ya había sido sugerido por autores anteriores.
[22] Sin embargo, la Propuesta N° 548 al SACC proponiendo su reconocimiento como tal, fue rechazada, por lo que se la considera una subespecie de Cinclodes pabsti.