Cyrtocarpa procera

[1]​ Su fruto es de color amarillo y se le llama chupandía o chupandilla.

[3]​ Cyrtocarpa procera fue descrita por Carl Sigismund Kunth y publicado en Nova Genera et Species Plantarum (quarto ed.)

Actualmente se localiza principalmente en los estados de Colima, Durango, Guerrero, Jalisco, México, Michoacán, Morelos, Nayarit, Oaxaca y Puebla.

En el estado de Puebla, los municipios productores de chupandía son: Francisco Z. Mena, Pantepec, Venustiano Carranza, Jalpan, Tlaxco, Tlacuilotepec, Zihuateutla, Xicotepec, Zacapala, Tepexi, Molcaxac, Juan N. Méndez, Coyotepec, Ahuatempan, Huatlatlauca, Caltepec.

En el siglo XVI, Francisco Hernández de Toledo relata: "el fruto es muy astringente y destila una baba sumamente glutinosa; esta, untada, cura las fiebres, se administra contra las disenterías y las diarreas.

Se usa comúnmente para resolver trastornos del aparato digestivo, tales como diarrea rebelde y disentería.

Preparada en cocimiento junto con cuachalalate (Amphipterygium adstringens) se emplea para lavar heridas y llagas, y para lograr una cicatrización más rápida; administrada por vía oral, se usa para quitar el dolor de cintura.

[8]​ La chupandía recibe otros nombres, que varían de acuerdo a la región donde se encuentra por ejemplo: