En ese entonces conoce al guitarrista Alfredo Bojalil Gil (conocido después como Alfredo Gil) en la emisora XEW donde colaboraban, ya sea cantando o tocando la guitarra, con la orquesta o con algún intérprete que necesitara su auxilio, entre ellos por ejemplo el puertorriqueño Rafael Hernández, Toña la Negra, Pedro Vargas y Agustín Lara.
Alfredo Gil y Chucho Navarro, decididos a seguir juntos como artistas, emprendieron la búsqueda de una primera voz para su nueva agrupación.
El elegido fue el cantante y guitarrista puertorriqueño Hernando Avilés, quien originalmente cantaba Tangos con Orquesta, en Manhattan.
Cuando los artistas regresaron de Nueva York a México en 1948, ya eran reconocidos en los lugares más recónditos de la República y al pisar México ya era una institución reconocida por su concepto “creado” para cantar boleros en tres voces, además introdujeron el instrumento llamado requinto que fuera inventado y patentado por Alfredo Gil.
Las primeras presentaciones del Trío, las hicieron en “El Patio”, convirtiéndolo en el más apreciado centro nocturno de ese tiempo.
Canciones Festivas: “El burro socarrón”, “Peláos estos”, “Gendarme 777”, “Cosas que pasan”, “El tigre rasurado”, “El zapato”, “El Loro Profesor“.
; “Viña del Mar”, Chile; “Teatro Austral”, “Teatro de la Plata” y “Teatro Opera”, en Buenos Aires, Argentina etc. en Europa: en la península ibérica,”Bar Chicote”,”Cleofás”en Madrid “Auditorios”, en el País Vasco, San Sebastián,”En Palacio” en Asturias, Barcelona, las siete Islas Canarias, etc. a Japón viajaron en varias ocasiones, llegaron por primera vez empezando los “50”con Raúl Shaw Moreno, 1ª voz y después grabaron siete Long Plays, con Johnny Albino en aquel país tan distante, fue tan grande el éxito que surgieron varios tríos imitadores denominados Los Panchos de Tokio, Los Panchos de Osaka, Los Panchos de Nagoya, de Fuji, etc; Los Panchos grabaron en su idioma original español, pero también incursionaron grabando temas en idiomas japonés, griego, inglés, ruso y árabe.
“Me siento feliz porque después de casi medio siglo, Los Panchos siguen interesando y emocionando a jóvenes.