Tiene la forma típica de los carpinteros, el cuello largo y una cresta erecta.
La cabeza es de color blanquecino con un patrón negro, amarillo, marrón o rojo.
El pico es largo (más largo que la cabeza) y —al igual que las patas de cuatro dedos zigodáctilos (dos dedos hacia delante y dos hacia atrás)— son gris plomizo.
Las hembras tienen la corona de un color que varía entre las subespecies, tales como negro con manchas blancas, amarillo o marrón con puntos más ligeros.
Las aves jóvenes son como la hembra, pero más apagadas, con los iris de color marrón.