La nobleza que demostró en el rugby, también la demuestra fuera del campo: es un impulsor de la República de Nueva Zelanda, apoyó la elección de una nueva bandera y en el pasado fue activista contra el apartheid.
Descrito como una promesa por su pase perfecto y patada precisa, fue seleccionado a los All Blacks por primera vez con solo 19 años, en junio de 1964 y debutó ante Les Bleus.
La fotografía del tackle alto que recibió de Frik du Preez es considerada emblemática en la historia del rugby.
Integró el plantel que enfrentó victoriosamente a los British and Irish Lions, siendo titular indiscutido en los cuatro partidos de la visita europea.
En total jugó 20 partidos (todos como titular) y marcó 12 puntos, productos de tres tries (un try valió 4 puntos hasta 1992).