Así nacieron las "Bobbers", motos desnudas, sin parabrisas, respaldos, faros auxiliares, defensas, con asientos minimalistas, guardabarros recortados y muchas veces sin freno delantero.
(Burt Munro mantiene el récord para menos de 1,000 cc logrado en una Indian Scout 1939 a 300 km/h).
El manillar más elevado, llamado "cuelgamonos" (ape hangers) hizo su aparición.
Esto hizo un estilo de motocicleta único y adaptado a cada piloto, puesto que cada uno decidía justo lo que necesitaba hacerse para crear su moto deseada, la mayoría del tiempo experimentando con colegas en garajes.
Unido a la ausencia de freno delantero, la conducción era por lo menos arriesgada, pero divertida, que era lo esencial.