Se encuentra a menudo en tocones viejos o madera muerta, pero también puede ser un parásito serio de árboles vivos.
De vez en cuando también infecta a coníferas (abetos, tuyas, etc.) Geográficamente tiene probablemente la misma distribución que sus hospederos.
[6][7] El hongo es aplicado directamente al árbol "maleza" en una pasta nutritiva la cual debe ser manejada y guardada convenientemente.
[8] En 2023 se publicó el primer caso de un hombre infectado por Chondrostereum purpureum en Calcuta, quien experimentó malestares como tos, fatiga, dificultad para tragar y voz ronca durante, al menos, tres meses.
La infección le causó fiebre y un absceso paratraqueal, que obstruyó parcialmente sus vías respiratorias.