Su mejor amigo es Luke, un camello que vive con su padre drogadicto.
Luke y Malachy intentan ganarse el amor de Michelle superándose el uno al otro en una carrera salvaje de sexo, drogas, vandalismo, hurtos y peleas.
Sin embargo, todo se les va de las manos cuando dan una fiesta en el Titanic Leisureplex, que resulta un desastre cuando Dave llega y encuentra todo el lugar destrozado.
A pesar de que Malachy está lleno de sangre y cardenales, se levanta y le dice a Luke que no quiere irse, ya que Michelle está llorando a su padre muerto.
El final de la película resulta ser la secuencia que la inicia.