Como su constitución era débil y delicada, el joven Charles Le Roy fue enviado a Montpellier, donde hizo sus estudios médicos, y después a Italia, de donde volvió directamente a París.
Su práctica médica era muy extensa y por ello causó consternación en Montpellier cuando volvió a París en 1777, a petición de su familia.
Pero este regreso a la capital francesa le fue fatal, porque murió dos años después.
Se debe a él la invención del higrómetro a condensación basado en la determinación del punto de rocío, cuya existencia demostró y precisó en 1731.
[1] Contribuyó igualmente a la Enciclopedia de Diderot y D'Alembert, con el artículo sobre evaporación.