El charango eléctrico permite ser utilizado con eficiencia en el mundo de los pedales de efectos y las nuevas tecnologías, ampliando el universo sonoro del charango tradicional que ha sido uno de los instrumentos más significativos del acervo cultural latinoamericano.
Este instrumento ha recibido diversas distinciones, entre las que se destaca el Reconocimiento a la Excelencia Artesanal de la UNESCO.
[1][2][3] Además, ha sido presentado en relevantes festivales internacionales de la música y la luthería tales como The NAMM Show (EE. UU.
),[5] Feria Internacional de Artesanías Hutzot Hayotzer (Israel),[6] Charangos del Mundo (Chile, Perú, Argentina),[7] entre otros.
Entre los principales músicos que han adquirido y promovido el charango eléctrico se encuentra Jaime Torres,[8][9] uno de los charanguistas más virtuosos y destacados de la Argentina.