Cerro de los Siete Colores

La villa de Purmamarca se encuentra a sus pies y ambos forman una de las postales más reconocidas del noroeste argentino.

Está conformado por sedimentos marinos, lacustres y fluviales que fueron depositándose en la zona durante siglos.

También, se puede subir a los miradores que rodean dicho pueblo para apreciarlo de frente.

La mejor parte del día para observarlo es sin duda el amanecer.

Fue declarada en el año 2003 Sitio Patrimonio Cultural de la Humanidad de la UNESCO debido a su enorme valor cultural.