La arquitectura religiosa de Campeche se debió principalmente a los franciscanos.
Su labor evangelizadora lo mismo generó grandes muestras de ayuda y desarrollo a la población indígena que actos de abuso contra las tradiciones y tesoros prehispánicos.
Otra de las órdenes que sentaron reales en tierras campechanas fueron los Jesuitas surgidos en el siglo XVI como respuesta a la Reforma Protestante, es a quienes se les debe una tarea evangelizadora de la mano de la docencia y el estudio; la geografía, la lingüística, la etnografía, la historia y las ciencias naturales del Nuevo Mundo inician su aparición en las crónicas de las exploraciones y viajes jesuitas.
La última orden allegada a estas tierras es la Orden Hospitalaria de San Juan de Dios o “Juaninos” a quienes se debieron valiosas tareas para la curación de enfermos y convalecientes; en México fundaron varios hospitales en sus Curias Provinciales.
[1] La construcción de la muralla se dio como consecuencia del gran auge económico y comercial que surge en aquel tiempo.