En el Ayuntamiento de Soriano fue dos veces Alcalde ordinario y una vez Regidor.
[1] En el año 1811, como la Banda Oriental quedó dependiente del gobierno montevideano a causa de la tregua entre la Junta porteña y el Virrey Elío, renunció a su cargo de comandante militar en Soriano y partió hacia Buenos Aires.
Los buques españoles que remontaban el río Paraná, habían fondeado frente al monasterio, a 200 metros de la orilla.
Y que intentarían seguir inmediatamente río arriba procurando pasar de noche las baterías de Punta Gorda, si es que no podían destruirlas, para saquear finalmente las poblaciones y barcos del Paraguay.
[2] Sin embargo, un testigo ocular del combate, el prisionero Francisco Guillot, da fe en su libro "Episodios de la Independencia" que[7]
En la ciudad de Buenos Aires, una calle se denomina "Comandante Celedonio Escalada".