Perteneciente a la noble casa güelfa de los Cavalcanti, fue un espíritu racionalista y epicúreo.
No creía en la inmortalidad del alma y sostenía que la única realidad estuviese compuesta por átomos.
Dante lo coloca en el Canto X del Infierno donde están todos los herejes y los epicúreos, como Farinata degli Uberti.
Justamente con este último, gibelino, Cavalcanti se había emparentado, como se hacía en aquellos tiempos entre familias adversas que querían reconciliarse: después del retorno de los güelfos a Florencia (1267) se casó con la hija de Farinata, Bice Uberti.
[1] Cavalcante Cavalcanti murió alrededor de 1280, cuando Dante apenas tenía 15 años.