Permaneció vacante durante trece años hasta que fue restablecida en virtud del Obispo Willerich en el 805.
San Pedro fue construida como la iglesia catedral en piedra arenisca local en varias etapas.
En el episcopado de Gebhard II (1219-1258) la iglesia fue remodelada para reflejar la nueva arquitectura gótica que se extendía por toda Europa.
Después del siglo XIV, la catedral fue utilizada principalmente para celebraciones religiosas y eventos especiales, pero no a diario.
Por fin, el obispo abrió la catedral en 1638, y desde 1639 el consejo municipal aceptaba los cultos luteranos en el templo exterritorial.
En 1538 la torre meridional, que portaba el reloj y todas las ocho campanas se derrumbó sin influjo externo.
Ésta continua a mantener los tejados y hacer reparaciones necesarias, pero las innovaciones fueron pagadas mediante donativos: Una modernización de los asientos, un nuevo altar mayor en estilo neogótico, un nuevo órgano y las primeras vidrieras policromadas después de la Reforma.
Los trabajos fueron concebidos e iniciados por Max Salzmann, un arquitecto joven, quien murió en 1897, y continuados por Ernst Ehrhardt.
Este último se mostró demasiado pesado, y en 1911 el coro tuve que ser estabilizado.
Con estos trabajos había investigaciones arqueológicas sobre fundamentos de catedrales precedentes.