Fue diseñada por el arquitecto Waldemar Ferdinand Lühr para ser una iglesia parroquial.
Fue construida entre 1879 y 1880 en estilo neogótico con ladrillos, con una planta longitudinal en forma de cruz latina.
Posee una sola torre de 72 m de altura en el extremo occidental, que forma parte de la fachada principal.
Restaurada en 1954, fue elevada a categoría de catedral en 1969, cuando se creó la nueva diócesis de Borg, con sede en Fredrikstad.
Destacan sus vitrales, obra de Emanuel Vigeland de 1917, y el retablo principal, una pintura de Axel Revold.