Catagonus wagneri

Otros nombres que recibe son: jabalí solitario u orejudo, chancho moro o collarejo.El pecarí quimilero ha desarrollado adaptaciones a este ambiente como los senos nasales, que le permiten combatir las condiciones secas y polvorientas.Llega a tener una longitud promedio de 1,1 m. Es un ungulado con un hocico duro y coriáceo.Cuando el pecarí quimilero está nervioso o asustado, huye y levanta los pelos de su espalda.[5]​ Las crías generalmente nacen entre septiembre y diciembre, pero se han encontrado camadas casi todo el año.Los recién nacidos son precoces, siendo capaces de correr apenas algunas horas después del nacimiento.Estos mamíferos se comunican mediante diversos sonidos, que van desde gruñidos a castañeo de dientes.Frecuentemente se bañan en barro o tierra y defecan en "estaciones" particulares.Por varias décadas fue considerada una especie extinta, hasta que en los años 1970 el zoólogo Ralph Wetzel, encuentra ejemplares vivos en el Chaco paraguayo.
Catagonus wagneri