Se encuentra situado entre los términos municipales de Arrabalde y Villaferrueña, en lo más alto de la sierra de Carpurias, dominando un amplio espacio sobre la vega del río Eria.
Estuvo ocupado desde la Edad del Bronce, pero su momento álgido fue al final de la Edad del Hierro (finales del siglo I a. C.) y durante el periodo romano.
[3] Aparece perimetrado por varias líneas de muralla que definen dos recintos yuxtapuestos.
Una de las puertas de estos recintos ha sido excavada y limpiada, reconociéndose dos bastiones cuadrangulares en sus dos flancos.
Al exterior, en la ladera meridional, hay evidencias de antiguas excavaciones mineras.