A fines del siglo XII los religiosos abandonan el monasterio por razones de seguridad (estaba muy aislado).Una docena de monjes se establece en el valle, entonces tierras pantanosas, que sanean.El lugar se transforma en vallis bona (buen valle), de donde viene el nombre: Valbonne (Valbona), que ya es fértil y habitable.[2] Las guerras de religión del siglo XVI, que asuelan Francia, también tuvieron sus repercusiones adversas en el monasterio.La Gran Cartuja (Grande Chartreuse) envió nuevos padres para restaurar y repoblar.El enérgico prior, François Laurent, consigue el retorno de la vida conventual regular al monasterio.El pastor protestante Philadelphe Delord, único comprador presente, adquiere la cartuja y sus dominios de 40 hectáreas por 300 000 francos.El monasterio es hoy un lugar turístico: se pueden visitar algunos de sus edificios, los bosques que lo circundan y sus viñedos.