Un cartón puede tener las mismas dimensiones que la obra definitiva, aunque esta situación no ocurre en todos los casos.
Entre los pintores más célebres que han realizado cartones se encuentran Rafael, Andrea Mantegna, Francisco de Goya y Leonardo da Vinci, de quien fue muy admirado su cartón para el cuadro La Virgen, el Niño Jesús y santa Ana.
Es en este punto donde se encuentra la similitud entre los cartones para lienzos y en los realizados para esculturas.
En el siglo XVI, Rafael Sanzio pergeñó sus celebérrimos cartones, en donde ilustraba escenas bíblicas.
Entre los pintores que trabajaron en ella se cuentan Francisco Bayeu, quien ilustró en ellos las escenas de raigambre costumbrista que tanto agradaban a Carlos III y a su hijo el príncipe Carlos.